jueves, 10 de noviembre de 2011

SIN FRONTERAS

El sentimiento del amor no tiene fronteras. Carece de sentido, el amor cuando es verdadero, puro, cristalino, trasciende en el tiempo y la eternidad, no es egoísta y conoce sus límites, el que lo siente sabe hasta donde se puede llegar, “El amor no es buen rato, ni un momento de placer”, es un sentir que no se podría describir jamás, solo se siente. El que lo siente cree morir porque se inunda de él…los que lo conocen saben de que hablo, nunca lo marchites, como se marchita la rosa cuando es tocada y tocada, por gusto. Todo tiene un equilibrio en este hermoso universo que nos dejo el creador, no hay que sobrepasarlo.

Una de las formas de amor es; recordar lo bello, lo bueno, el gesto de alguien que admires, de alguien que de un modo u otro te conozca en cuerpo, alma y espíritu.

El amor no debe ser vulgar, debe ser gracioso, hasta en las tontas discusiones, cuando ya no sientes eso, deja volar un poco tu imaginación y recuerda cosas gratas que en algún momento te han hecho sonreír, para que tu vida sea más llevadera.

Sé como el jazmín que esparce y regala generosamente a todos los vientos y todas las miradas, a delicadeza de su aroma y encanto de su blancura, el se marchita, si las manos que la sorprenden le acarician o le tocan…huye tu de las manos que agradecen, porque te harían mal, marchitarían el encanto de tu esencia.

Graciela Urbaéz.